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[Videojuegos] Análisis de Too Human

Esta entrada se publicó originalmente en el foro de ultimonivel.net el 6 de marzo de 2014


Sabía perfectamente que era un juego malo cuando lo compré, pero tenía mucha curiosidad. Esa mezcla entre mitología nórdica y ciencia ficción me parecía demasiado jugosa como para dejarla pasar, pese a que el juego fuese una basura. Lo he ido jugando a ratos, alternándolo con Dragon's Dogma: Dark Arisen. Hice bien al no tomarme muy en serio a este Too Human, porque pese a que mis expectativas iniciales eran muy bajas, el juego es aún peor de lo que yo pensaba. Es un desastre de proporciones tan épicas que haría llorar a los mismísimos dioses nórdicos.

He leído que este juego empezó a desarrollarse para la primera Playstation, que después pasó a GameCube y finalmente acabó en Xbox 360. Pretendía ser el principio de una trilogía, pero se pegó un batacazo tremendo y nunca hubo continuación. Imagino que muchos de los problemas del juego tienen que ver con esos cambios de plataforma. Quizá también les pudo la ambición, ya que el juego aspiraba a más de lo que el estudio podía conseguir. Tenían ideas muy interesantes, pero su materialización en el juego deja mucho que desear.

Pese a todo, la base de Too Human es tremendamente atractiva. El argumento nos lleva a una Tierra futura invadida por una raza de seres mecánicos procedentes de otro mundo. La posterior guerra dejó el planeta devastado y convertido en un desierto helado. Para luchar contra los invasores aparecieron los Aesir, guerreros que usaban la tecnología cibernética proporcionada por la inteligencia artificial O.D.I.N. Los demás humanos empezaron a adorar a los Aesir como dioses y se congregaron a su alrededor, dejando que ellos librasen la guerra a su modo. El juego nos pone en el papel de uno de los Aesir, Baldur, justo en el momento en el que el conflicto se recrudece. Como villanos tenemos a Loki, el Aesir traidor, y a Hela, una mujer que se ha aliado con las máquinas para alcanzar la inmortalidad. Otros personajes mitológicos como Heimdall y Thor también hacen su aparición en el juego (y el Thor de este juego se acerca mucho más al Thor mitológico que el Thor de Marvel que hemos visto en cómics y películas, por cierto).

Además, el diseño de todos estos personajes está muy conseguido. A mí me ha parecido superatractivo.

Siguiendo con la combinación entre mitología y ciencia ficción, el juego presenta al Árbol del Mundo como una red cibernética que permite a los Aesir navegar por el ciberespacio. Éste aparece como una versión mítica de la vieja Tierra, donde se pueden conseguir runas para activar hechizos que ayuden a Baldur en combate. El protagonista puede optar por conservar su humanidad o volverse cada vez más cibernético y tiene una cantidad enorme de armas y armaduras a su disposición. Too Human tiene parte de RPG y parte de hack & slash.

Hasta aquí todo suena muy prometedor: el contexto es muy chulo, la historia es interesante, el diseño es muy vistoso y parece que hay muchas opciones para combatir. Pero justo en lo más importante, que es la jugabilidad, es donde el juego falla y todas esas ideas prometedoras se quedan en nada:

  • La posibilidad de navegar por el ciberespacio y descubrir los misterios del mundo virtual se queda en nada, porque ese mundo está casi vacío y explorarlo no aporta gran cosa. Los viajes al ciberespacio se ven reducidos a la resolución de unos puzzles tontísimos para abrir puertas y poco más. Viajar a ese mundo virtual puede parecer interesante al principio, pero luego se vuelve un coñazo.
  • Hay una gran cantidad de hechizos que podemos activar reuniendo runas, pero la gran mayoría de ellos no aportan nada. Exceptuando un par que tienen un efecto visible en los combates, los demás no valen para gran cosa. Se los podrían haber ahorrado y no se echarían en falta.
  • La cantidad de armas y armaduras es abrumadora. Hay armas de todo tipo, tanto de corto como de largo alcance (puedes usar tanto espadas como pistolas), y cada una tiene sus estadísticas y propiedades asociadas. Esto estaría muy bien de no ser porque gestionar el inventario pronto se vuelve algo tedioso. El sistema de gestión de inventario es parecido al del primer Mass Effect, por lo que resulta lento e interrumpe muchísimo el ritmo del juego.
  • El control durante los combates es un asco. No hay un botón para atacar, sino que los ataques se hacen moviendo el stick derecho en la dirección del enemigo. El sistema es lento, torpe y frustrante.
  • A la hora de combatir, da igual lo hábil que seas, el nivel que tengas, los hechizos que uses o las armas y armaduras que tengas equipadas. Los enemigos siempre hacen una cantidad de daño desproporcionada. Un golpe de un enemigo del montón te puede hacer el mismo daño que el ataque de un jefe final. Es una locura. Jugar a este juego significa acostumbrarse a morir un montón de veces. Para colmo, cuando mueres hay una cinemática que no se puede saltar de una valkiria cibernética que baja del cielo a recoger tu cuerpo. La primera vez me pareció un detalle muy chulo. Después de ver a la maldita valkiria cuarenta veces estaba más que harto.
  • Sólo hay cuatro o cinco tipos de enemigos. Casi todo el juego consiste en hordas y hordas de enemigos genéricos que se lanzan contra ti. A veces te acompañan otros personajes, pero su ayuda no sirve de nada (¡casi no hacen daño a los enemigos, así que o los matas tú o nada!). Lo normal es que los personajes que te acompañan (soldados genéricos) vayan muriendo por el camino y que sean sustituidos por otros que aparecen mágicamente al entrar en una nueva zona. En uno de los capítulos incluso te acompaña Thor, pero es tan inútil como cualquier soldado genérico.
  • El árbol de habilidades es muy reducido. Sólo puedes elegir dos habilidades especiales, que tampoco es que aporten gran cosa a la jugabilidad.
  • Elegir conservar la humanidad u optar por la alineación cibernética apenas tiene efecto sobre el desarrollo del juego.
  • Evidentemente, al estar pensado como la primera parte de una trilogía que nunca se terminó, el juego no tiene un auténtico final. Son unas 9 o 10 horas de juego (demasiadas, para lo torpes y aburridos que son los combates) para descubrir una historia que no vemos acabar. El ansiado enfrentamiento contra Loki nunca llega a producirse.

En fin, no me gusta criticar tan duramente a un juego, pero es que Too Human es un juego pésimo. Y me parece muy triste, porque creo que realmente tenía mucho potencial. A pesar de que jugablemente es un asco, hay muchas cosas que me han gustado. La combinación entre mitología y ciencia ficción funciona muy bien, el contexto es fascinante y los personajes están muy bien caracterizados. Quizá la historia que se han inventado para Baldur (que no tiene nada que ver con el Baldur mitológico) esté llena de tópicos, pero se desarrolla bastante bien y tiene una conclusión estupenda con ese gran enfrentamiento final contra Hela. Las escenas de Loki también están muy conseguidas y Thor parece realmente un dios vikingo, como debe ser. Por otro lado, la estética de este juego me parece fabulosa. Los personajes me encantan y hay algunos escenarios geniales, como el despacho de Heimdall o la sala del trono de Hela. Hasta la banda sonora está chula. Es el apartado jugable lo que lo mata.

¿Ha merecido la pena? Pues no diré que no. Mi curiosidad está saciada y ya puedo dejar este juego en la estantería para el resto de la eternidad. Me quedaré con los detalles que me han gustado y me olvidaré de todo lo demás.


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